domingo, 28 de febrero de 2010

Día 02 de Febrero por la tarde: Al final salí recién a las 11:00 horas dirección al sur, pasé por Puerto Montt, una ciudad considerada grande de aproximadamente 200.000 habitantes, que será la última gran urbe que pasaré. Una vez llenado el depósito de mi “Atlantis”, que es como mi amiga Maria Nela ha bautizado mi moto, y llenado también el depósito adicional de 10 litros que llevo conmigo, continúo rumbo al sur. Después de aproximadamente 40 km. me abandona el asfalto y a continuar por pistas. Sobre las 13:00 hrs. llego al primer transbordador que me llevará durante 45 minutos a través de fiordos e islas hasta Puelche desde donde continúa la carretera, si se le puede denominar así. Otros 60 km de camino, que ésta vez estaba en peores condiciones que de costumbre, debido al continuo ir y venir de camiones lo hacían bastante peligroso por las enormes rodaduras que dejaban a su paso. Algunos sustos he pasado pero sigo entero, - la mala hierba nunca ….-
Al llegar a mi destino, la aldea de Hornopirén ,y después de informarme del siguiente transbordador que aquí debo coger, me informan que no hay plazas hasta dentro de una semana. Pero un amable lugareño me informa que de todas formas vaya mañana sobre las 7:00 al puerto que posiblemente me puedan colar. Este trayecto por mar dura aproximadamente 9 horas y me dejará en Chaiten. Si, ese Chaiten, que actualmente es una ciudad fantasma tapada de ceniza por la erupción de hace unos años del volcán del mismo nombre. Este buen hombre me contesta, a mi pregunta de donde hay un camping, de que él tiene una habitación para alquilar por 10€ con desayuno incluido. Bueno, ahora estoy escribiendo desde la mesa de la cocina con una cervecita muy fría, Joaquín el pequeño de la familia ronda alrededor mío alucinado con mi mini-ordenador, luego está Katia y Ricardo, que deberán tener 12 y 16 años respectivamente y por último está la señora de la casa haciendo las labores. En 5 minutos soy parte de sus vidas. Me impresiona la cordial acogida de esta gente que poco tiene. Por cierto que temporal de agua y viento tengo ahora encima, menos mal que he cogido este hospedaje y no el camping como era mi idea inicial. Subiré unas fotos de este humilde pero acogedor hospedaje.
Introduciendo en internet, el siguiente enlace https://share.findmespot.com/shared/faces/viewspots.jsp?glId=1Y3qoCqChKW5xCfVnR7trtOPXTjSfgZFT (clave:1234), podéis seguir mi aventura en tiempo casi real gracias a la Radiobaliza que llevo encima.

6 comentarios:

  1. El viajar...enriquece el espiritud.

    Sin duda, tu volveras con esa fortuna!!

    Sigue contando!!!!!

    ResponderEliminar
  2. Oye...lo de la radio baliza un puntazo.

    Cuidate....OK?

    ResponderEliminar
  3. a ver!!!!!!!!! kiere leer más supervivencia y menos hospedajes, con desyunos, niños encantadores, hospitalidad chileta, aunq sea acampa en el jardín!!!! q no se diga!! si tienes un saco hecho a medida!!!!!!!!

    ResponderEliminar
  4. Pregunta mamá que por qué parece que estas volviendo? por que vas hacia el norte???? todo bien? besitos d mamá y mio

    ResponderEliminar
  5. Bien por ti Richard, cada día te sigo con interés los relatos y las fotos (tu barba coge forma de Robinson Crusoe)

    ResponderEliminar
  6. Aupa Richard, vamos a aprender todos supervivencia con tu viaje.
    Que experiencia mas acojonante

    Que siga todo bien. Un abrazo

    ResponderEliminar